A partir de una propuesta de la Academia Española de la Radio, y con el apoyo oficial de la ONU, la UNESCO declaró el 13 de febrero como el «Día Mundial de la Radio».
En el siglo XIX, varios inventores, científicos e ingenieros estuvieron investigando en áreas como las ondas electromagnéticas (en el caso de Maxwell), la corriente alterna (como hizo Hertz) o la antena (inventada por el ruso Popov). Incluso, el famoso ingeniero Tesla había experimentado con la transmisión de energía electro-magnética a distancia. Suele atribuirse la invención de la radio a Marconi, aunque él se basó en esas investigaciones anteriores, llegando a utilizar varias de las patentes de Tesla sin permiso. Eso dio lugar a una batalla judicial entre ellos dos. La historia es larga y complicada, pero podríamos resumirla diciendo que Marconi fue el primero que mostró públicamente una emisión de radio entre Francia y Reino Unido, a través del Canal de la Mancha, y es reconocido como el «inventor de la radio». Pero, de hecho, el mérito es compartido parcialmente con otras mentes brillantes de la época. De algún modo, la radio tenía que acabar existiendo como medio de comunicación. Tecnológicamente, era un avance lógico. Y, por cierto, como ya habrás adivinado, la palabra «radio» proviene de la abreviatura de «radiodifusión» y «radio-receptor».
La primera radio para el coche la inventó George Frost en 1922 y se incluía en el Ford T, uno de los vehículos más famosos de la época. Pero, el gran salto llegó con las emisiones comerciales; todos sabemos que un invento se globaliza cuando se convierte en negocio. La era de la radio comercial empezó en una emisora de New York en 1922, al incluir anuncios publicitarios. Al cabo de poco, se mezclaban con narraciones, historias, recetas de cocina, contenido religioso… En fin, que la estructura de programación que todos conocemos ya fue tomando forma. El primer presentador estrella de la historia de la radio fue el sacerdote Charles Coughlin, que en los años 30 llegó a tener más de 40 millones de oyentes (!!!).
En 1948, tres trabajadores de la compañía Telefónica Bell de Estados Unidos –que ganaron en 1957 el premio Nobel de Física– inventaron el transistor. Este pequeño componente electrónico permitió sustituir las grandes válvulas de vacío de los primeros receptores de radio por una nueva tecnología más eficiente, y en ese mismo año 1948 aparecieron las primeras radios a transistores, de la propia Bell.
En España, la primera emisora de radio oficial fue la EAJ-1 Radio Barcelona, que comenzó a emitir comercialmente el 14 de noviembre de 1924. Pero pronto la tecnología dio otro salto: hasta entonces, se usaba Modulación de Amplitud (AM), en ondas corta, media y larga, pero en 1933 Edwin Howard Armstrong inventó la radio por Modulación de Frecuencia o FM, que permitió transmisión de audio de alta calidad. Y eso la hizo ideal para la música.
Vamos, ahora, con algunas curiosidades:
— Uno de los locutores de radio más famosos de la historia del cine fue el personaje del actor Robin Williams en la película «Good Morning Vietnam».
— En 1982, en plena Guerra de Malvinas entre Argentina y Reino Unido, en la transmisión del partido Alemania-Inglaterra del Mundial de España, se les prohibió a los comentaristas deportivos mencionar el nombre «Inglaterra». Los locutores se inventaron todo tipo de malabarismos lingüísticos para no mencionar la palabrita prohibida. Decían, por ejemplo: «avanzan los de rojo». O bien «no encuentra la pelota el rival de Alemania», o «se agrupa la defensa de la Rubia Albion». El partido fue un desastre, terminó 0 a 0, y la locución pasó a la Historia como un caso paradigmático de mal periodismo, pero los periodistas cumplieron y no mencionaron NUNCA la palabra «Inglaterra».
— Otra de las anécdotas deportivas sucedió durante la Segunda Guerra Mundial. Los informes meteorológicos fueron censurados para que los submarinos nazis no conocieran el estado del clima. Hubo un partido de fútbol en Chicago que se jugó en mitad de un intensa niebla. Y claro… ¡el comentarista no podía decirlo por antena! Pero es que, además, no veía lo que sucedía en el campo. Tuvo que improvisar en directo, y se inventó todos los comentarios. Ese suceso pasó a la historia de la radio como «el partido que se narró a ciegas». Finalmente, el Gobierno de Estados Unidos le agradeció al comentarista que no hubiera mencionado nunca la palabra «niebla».
— Si alguna vez te has preguntado cuál ha sido la radio más potente de la Historia, tenemos la respuesta. La WLW emitía en 1930 con 500kW. Para que te hagas una idea de la barbaridad de esa potencia: por la noche cubría la mitad del planeta Tierra y su señal era tan fuerte que los vecinos que estaban cerca de la antena de emisión podían escuchar el audio en sus ollas, sartenes e, incluso, en los resortes de los colchones, que vibraban (¡y se escuchaba la radio!).
— Uno de los momentos más importantes en la historia de la radio (también porque fue la primera vez que los japoneses escucharon la voz de su emperador Hirohito) fue el mensaje sobre el anuncio de la rendición de Japón en la Segunda Guerra Mundial. Lo curioso es que lo hizo en una variante arcaica del idioma japonés, que solamente los más cultos y los samuráis pudieron entender. ¡Sería como si Felipe VI hiciera un discurso por radio en español medieval!
— En la Primera Guerra Mundial, en 1914 el receptor de la Torre Eiffel interceptó las comunicaciones de las radios alemanas, evitando que las tropas enemigas avanzaran. Así, se logró la victoria en la Primera Batalla del Marne y se añadió un nuevo dato curioso a la historia de la radio. Este hecho cerró las dudas sobre si desmantelar la Torre Eiffel que, como sabemos, se acabó convirtiendo en el gran símbolo internacional de París.
— Entrando ya en el campo de los misterios históricos, existen desde la Primera Guerra Mundial, hace unos 100 años, las llamadas «Numbers Stations» (Radios de Números). Se ha especulado mucho sobre ellas, porque nadie sabe con seguridad su función. Aunque todo apunta a que emiten datos posicionales o instrucciones para espías, probablemente encriptados. Una de las más famosas es una misteriosa señal rusa llamada UVB-76, que ha estado transmitiendo continuadamente desde 1982, y que se sabe que está cerca de Moscú. Emite zumbidos 25 veces por minuto y, cada 2 años, una cadena de nombres y números, aparentemente al azar, que no han podido ser descodificados.
— La emisión de radio más famosa de la Historia sucedió el 30 de octubre de 1938: la radionovela «La Guerra De Los Mundos» de Orson Welles. Estaba tan bien teatralizaba, con actores y con efectos especiales de sonido, que la invasión extraterrestre que se contaba era extremadamente realista para la época. Provocó un pánico generalizado en las calles de New York y New Jersey. Muchos miles de personas creyeron que estábamos siendo, de verdad, invadidos por extraterrestres.
La radio ha evolucionado durante más de 100 años. Ha pasado por AM, FM, emisiones de satélite, radio digital DAB, radio online y ahora por los podcasts especializados. Afortunadamente para todos, la radio ha sobrevivido, se ha transformado y ha avanzado con los tiempos.
Nuestro país tiene el impagable privilegio de haber contado con grandes gigantes de la radio, como Joaquín Luqui, Luis del Olmo, Xavier Sardà, Iñaki Gabilondo, Jesús Hermida, José María García, José Antonio Abellán, JuanMa Ortega, Fernandisco y muchos, muchos más. Entre esos gigantes que inspiraron nuestra infancia y juventud, queremos mencionar, especialmente a Toni Peret que, por cierto, ha apoyado activamente a AEDYP desde sus inicios, en nuestra defensa del DJ y el Productor Musical.
La radio ha sido, y sigue siendo, un medio que nos conecta con personas, nos sirve para estar informados, compartir opiniones, escuchar nuestra música o DJ preferido, entre otras muchas cosas. Pero sobre todo, la radio abre nuestras mentes y es fundamental por la diversidad cultural. Es por todo esto que en este día tan especial, AEDYP se une al reconocimiento del impacto de la radio en la cultura de nuestra sociedad, y aplaude el gran trabajo que realizan las personas que la hacen posible, para transmitir, comunicar y unir a las personas. Porque no hay nada más humano que la música. Porque no hay nada más humano que la comunicación.
Solamente un dato para finalizar: Una onda de radio es radiación electromagnética. Si nada la para, según la Ciencia, seguirá viajando por vacío del espacio PARA SIEMPRE. Pensémoslo… ¡Que nunca nada ni nadie pare la radio!
Desde AEDYP, los DJs y Productores Musicales españoles te desean ¡Feliz Día de la Radio!
Un artículo de Ramon Moragas y Mike Platinas, desde la Redacción de AEDYP.
Imágenes: Ramon Moragas/pixabay.com
Dejar una Respuesta